CURSO GRATIS DE AHORRO E INVERSIÓN 13. Minimiza tus pérdidas y controla tu inversión

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Son la valeriana de tus inversiones. Son el yin y el yang, la cara y la cruz, Epi y Blas.

Vamos a verlos en detalle.

Ha llegado el momento de controlar nuestras inversiones para evitar tragedias.

Imagina que puedes limitar tus pérdidas y tus ganancias cuando inviertes. Pues eso hacen estas herramientas.

Todo lo que te voy a contar en este capítulo es cuando decides hacer inversión activa, es decir, sin copiar lo que hace otra persona y siendo tú el que decide cada inversión.

STOP LOSS. Hay que saber perder.

Como te he comentado antes, por defecto en las inversiones que realices, te fija una pérdida del 50%. Pero puedes cambiarlo en el momento de configurar tu inversión. También lo puedes aplicar cuando copias a inversores como Mariano.

Una de las filosofías más sanas para invertir es minimizar las pérdidas. Es la base.

Cuando una inversión se acerca a su posición de Stop Loss y, por lo tanto, a la posibilidad de perder parte de nuestro dinero, es cuando saltan todas las alarmas y nos entran los siete males. Bienvenido al club.

En ese punto tienes dos opciones: ser fiel a la estrategia que hayas diseñado o bien meter más dinero del que tengas disponible para intentar esperar el momento en el que comience a remontar. Se puede convertir en una tumba que terminas cavando tú mismo. Por experiencia.

TAKE PROFIT. Hay que saber ganar

Si es importante saber perder y cortar una sangría a tiempo, también lo es el saber ganar cuando vas ganando. Lo que se llama en el mundo de la inversión:

"dejar correr los beneficios"

Los nervios cuando he ido ganando dinero son algo extraño. La cosa va bien, pero me costaba disfrutar del momento. Te puede entrar el tembleque y cerrar una operación que iba bien, pero que por miedo a que se tuerza, aplicas lo de mejor pájaro en mano que ciento volando.

Eso se arregla diseñando un método que apliques a rajatabla y que no cambies por nada. Tienes que creer en lo que estás haciendo y pensar que, si algo está subiendo, no tiene por qué dejar de hacerlo.

Pero para calmar los nervios, en eToro hay un grandísimo invento.

STOP LOSS DINÁMICO. Ante todo, mucha calma.

Imagina que has invertido 100$ con un Stop Loss del 10%; es decir, que si pierdes 10$, tu inversión se cierra.

Imagina que tu inversión te está dando un beneficio de 20$: 120$

Tienes 120$ y un gran miedo a que la cosa de la vuelta y comience a retroceder. Es entonces cuando entras en pánico y miras tu Stop Loss situado en -10$.

Es entonces cuando puedes proteger tus ganancias y colocar tu Stop Loss en 0$. De esa forma, si la cosa se da la vuelta, no pierdes nada de dinero. Tiene poca gracia porque tampoco lo ganas.

Lo interesante es que puedes activar la casilla de Stop Loss dinámico. Eso significa que:

De esa forma, te aseguras un beneficio mínimo del 30$ aunque las cosas vayan mal, dando la oportunidad a que una inversión que te va bien... no sea cerrada por miedo a perderlo todo.

ALERTA DE PRECIO. No descuides tus inversiones

Una ayuda más. En eToro puedes activar en todas las inversiones una ALERTA DE PRECIO.

Imagina que hemos hecho una inversión en INDITEX y hemos establecido un Stop Loss del 8% para que se cierre. Si invertimos 100$, solo estamos dispuestos a perder 8$.

Pues mira

Podemos decirle a eToro que nos avise cuando la cosa se ponga fea. Es decir, cuando nuestra inversión vaya perdiendo un 8% y se acerque a la zona peligrosa.

En ese momento es cuando podemos tomar decisiones. Aunque, como ya hemos dicho, no es bueno aferrarnos a una inversión que va mal porque podemos terminar perdiendo más dinero… hay ocasiones en las que podemos invertir más dinero y ampliar nuestra pérdida momentánea, porque tengamos la certeza de que es algo pasajero.

Un ejemplo claro ha sido el derrumbe de valores como: Aena, Amadeus, Meliá y todos los valores turísticos durante la pandemia. Han sufrido pérdidas brutales durante la pandemia de 2020, pero todas ellas se están recuperando a medida que se va produciendo la desescalada a nivel mundial.

Espero y deseo que este capítulo te haya tranquilizado al darte herramientas para configurar bien tus inversiones. Cada una de ellas hay que pensarla bien y dejarla configurada desde el principio: con lo que estamos dispuestos a perder, a ganar y poner la alerta que nos haga reaccionar a tiempo si llega el caso.

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Recuerda: cuando invertimos en bolsa, nunca perdemos nuestro dinero hasta que ejecutamos la venta de una inversión que está en pérdidas. Si se recupera, volverás al estado inicial y, muy posiblemente, a ganar dinero con la misma inversión que parecía un desastre. Por otro lado, empeñarte en meter más dinero en una operación que va mal, puede tener muchas peores consecuencias que asumir tu error y seguir adelante.

Diseña un plan y, si te funciona, síguelo por encima de todo.

Compra cuarto y mitad de resiliencia. La vas a necesitar.

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